Anti-habilidades en el lugar de trabajo: 9 malos rasgos de personalidad que hay que dejar atrás
En un entorno laboral cada vez más dinámico y colaborativo, las habilidades interpersonales se han vuelto tan cruciales como las técnicas. Sin embargo, a menudo pasamos por alto las malas actitudes que pueden sabotear nuestro crecimiento profesional y el ambiente de trabajo. Desde la negatividad hasta la falta de empatía, ciertos rasgos pueden convertirse en verdaderos obstáculos para nuestra carrera. En este artículo, exploraremos nueve anti-habilidades que, lejos de ser inofensivas, pueden frenar no solo tu desarrollo individual, sino también el de tu equipo. ¡Es hora de dejar atrás lo que nos debilita y construir un futuro laboral más positivo!
En el mundo laboral, a menudo nos centramos en resaltar nuestras habilidades y cualidades positivas para destacar entre la multitud. Sin embargo, es igualmente importante reconocer y abordar las «anti-habilidades» que pueden obstaculizar nuestro crecimiento profesional. Estas son actitudes y rasgos de personalidad negativos que debemos dejar atrás si queremos tener éxito en el lugar de trabajo. En este artículo, exploraremos nueve de estas anti-habilidades y cómo podemos superarlas para convertirnos en empleados más efectivos y valiosos. ¡Prepárate para descubrir qué rasgos debes dejar atrás para alcanzar tu máximo potencial!
Pasamos mucho tiempo hablando sobre lo que deberías aportar a tu lugar de trabajo y a tu carrera, pero ¿qué pasa con lo que deberías dejar atrás?
Si quieres pasar a leer sobre estas anti-habilidades, ¡adelante!
Entonces, definamos nuestras anti-habilidades, qué son y qué no son. Más allá de eso, exploremos ejemplos en los que estos comportamientos podrían colarse en su trabajo.
¿Qué son las anti-habilidades?
Las anti-habilidades son las habilidades que específicamente no le gustaría mostrar en su currículum. A veces, son habilidades ruidosas y feas que te dan mala reputación. Otras veces, son “habilidades” oscuras y al acecho que podrían estar haciendo daño sin que usted se dé cuenta.
Pasivo-agresivo a gran escala: Cuando llamas a tu compañero de equipo, en una reunión con la gerencia, sobre un detalle perdido o una determinada parte del proyecto que tú “personalmente” habrías hecho de manera diferente.
Pasivo-agresivo a menor escala: Cuando rehaces silenciosamente el trabajo de tu compañero de equipo sin decir nada.
El riesgo que usted corre, como empleado, es el de volverse “conocido” como una anti-habilidad. Nadie quiere ser conocido como una serpiente pasivo-agresiva traidora, ¿verdad?
Lo que pasa con los equipos es esto: cuando vas contra tu propio equipo, todos pierden. Si suena a cliché es porque es verdad.
Exploremos todas las anti-habilidades + cómo eliminarlas.
#1 Anti-Skill: Indeciso
Empezamos con la indecisión porque suena bastante inocente. La advertencia aquí es que es probable que todos combatan algunas de estas anti-habilidades en su propio trabajo. Somos humanos, ¡así que obvio!
Indecisión a gran escala
- Hacer cuellos de botella en los proyectos al ejecutar constantemente el trabajo por parte de la gerencia antes de pasar al siguiente paso.
- Socavar su propio aporte agregando frases como: «No sé, tal vez eso no tenga sentido, ¿qué tú ¿pensar?»
Indecisión a menor escala
- Realizar una encuesta por correo electrónico sobre lo que todos quieren para el almuerzo cuando llega el momento de elegir
Cómo combatir la indecisión
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#2 Anti-Skill: demasiado confiado o engreído
¿Recuerdas que hablamos de utilizar la confianza para combatir la indecisión?
Arrogancia a gran escala
- Alguien que sólo habla de sí mismo, de sus éxitos y de cómo hace las cosas. Alguien que no esté interesado en nuevas perspectivas o ideas.
Arrogancia a menor escala
- Aprovechar el éxito de otra persona mencionando cómo hiciste algo similar (y, según tus estándares, mejor).
Cómo combatir la arrogancia
Sin embargo, reconozca cuándo es el turno de otra persona de hablar y hacer que se escuche su voz. Si te encanta el sonido de tu propia voz, eso es increíble. Úselo para defenderse a sí mismo y a quienes lo rodean.
#3 Anti-Skill: Desenfocado
Cuando no estás concentrado en el trabajo, corres el riesgo de cometer errores tontos, incumplir plazos y otros errores completamente evitables.
Falta de enfoque a gran escala
- Olvidarse de implementar los comentarios de los clientes antes de que un proyecto grande entre en funcionamiento
- Enviar una respuesta: todo lo que definitivamente solo querías enviar a una persona
Falta de enfoque a menor escala
- Falta un pequeño error ortográfico* en una presentación
*Dependiendo de tu lugar de trabajo, la concentración puede ser muy importante. Si se trata de grandes intercambios de dinero, una “simple” falta de concentración puede costar literalmente miles de dólares. En otros lugares de trabajo, la falta de concentración puede no ser “un gran problema” per se, pero puede ganarte la reputación de ser descuidado o demasiado distraído.
# 4 Anti-Habilidad: Flakey
A nadie le gusta un copo.
Ganarse una reputación de inútil en el lugar de trabajo… no es nada bueno. No estamos hablando del hecho de que quizás no quieras participar en la hora feliz de Zoom o (algún día) unirte al equipo de bolos de la empresa. La debilidad en el trabajo parece la de alguien que dice que hará algo de cierta manera sólo para cambiar de opinión, pasarle la responsabilidad a otra persona o ignorar cualquier promesa por completo.
La descamación suele ser una antihabilidad “ganada”. Esto significa que el miembro más inestable de su equipo probablemente sea un gerente o líder que tiene la posición de ser inestable.
Descamación a gran escala
- Prometer aumentos y otros incentivos a los empleados cuando se alcanza una meta. Cuando la portería golpea, *grillos*
- Llegar tarde constantemente a las reuniones, cancelar citas de último momento o nunca prestar mucha atención
Descamación a menor escala
- Olvidar un detalle mencionado en una reunión anterior
- Prometer demasiado y luego corregir ante la realidad.
Cómo combatir la descamación
#5 Anti-Skill: Pasivo-agresivo
“¿No puedes golpear tu escritorio con el lápiz durante una llamada de Zoom?”
A veces, tenemos relaciones “especiales” con ciertos compañeros de trabajo. Estos son tus compañeros de equipo con quienes bromeas, te diviertes y, en general, te diviertes estar cerca. Estas relaciones pueden adoptar una cualidad de fraternidad y son buenas, divertidas y buenas… hasta que dejan de serlo. Si bien puedes tener una relación divertida con un compañero de equipo, tus bromas afables pueden terminar pareciendo (¡o siendo!) pasivo-agresivas.
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Pasivo-agresivo a gran escala
- Hacer un comentario, delante de mucha gente, sobre algo que un compañero de trabajo puede haber olvidado (por ejemplo: “Bueno, Brenda, parece que estás no ha dormido lo suficiente. ¡Mira todos estos errores tipográficos!”)
- Hacer una queja pública que obviamente esté dirigida a una persona específica (en lugar de hablar con esa persona en privado)
Pasivo-agresivo a menor escala
- «Bromear» con tu perfeccionista mejor amiga del trabajo sobre cómo usó el «tu» equivocado en un correo electrónico
Cómo combatir la pasividad-agresividad
- La opinión de este escritor es que la agresión pasiva realmente no tiene cabida en la oficina. La agresión pasiva se utiliza para evitar problemas más profundos por el momento. A menudo, esto sólo los empeora.
Intenta no hacerlo.
Consejo profesional: Si alguna vez comienzas un correo electrónico o una oración con las palabras «¿No puedes?», es probable que estés incurriendo en algún comportamiento pasivo-agresivo. Entonces, ummm, ¿puedes simplemente no hacerlo?
# 6 Anti-Skill: deshonesto
Todos conocemos dos hechos sobre la deshonestidad en el lugar de trabajo, así que dejémoslos de lado y ataquemos este.
Todo el mundo ha sido deshonesto en el lugar de trabajo en algún momento.
La deshonestidad no siempre es «mentir».
Si está familiarizado con el universo Real Housewives, sabrá sobre el intento de salirse con la suya con tecnicismos cuando se trata de ser deshonesto. La deshonestidad es un paraguas, y allí debajo hay sombra.
La deshonestidad puede consistir en retener información, hacer ajustes de último momento para encubrir un error, aprovecharse del buen carácter de alguien, abusar de sus gastos y mucho más.
Aquí está la cosa. A menos que tengas un líder muy indulgente, es muy, muy difícil recuperar la reputación de persona deshonesta.
Deshonestidad a gran escala
- Tomar crédito por el trabajo de otra persona
- Abusar de los privilegios que tienes en detrimento de tu equipo
Deshonestidad a menor escala
- La única situación en la que creemos que la deshonestidad está “bien” es cuando se protege a alguien de sufrir abuso o daño, en cuyo caso, debe discutirlo con RR.HH., el liderazgo o la EEOC.
Cómo combatir la deshonestidad
No quiero ser grosero, pero sabes la diferencia entre el bien y el mal. Una práctica que nos resulta útil es considerar que la pantalla de su computadora se proyecta en la pared para que todos la vean. ¿Todo lo que estás haciendo va en aumento?
#7 Anti-Skill: Fanfarrón / Fanfarrón
Todo lugar de trabajo ha tenido un fanfarrón en algún momento.
Puede ser un poco divertido cuando alguien no tiene conciencia de sí mismo. Podría ser un jefe que gana 10 veces su salario hablando de que *simplemente no pueden decidir* en qué isla veranear este año. Es el compañero de trabajo que llega todos los lunes alardeando de todos los intereses amorosos que tiene.
Es tu jefe quien (oye, espera un segundo) se jacta del trabajo que estás seguro de que te robaron. A nadie le gusta una persona fanfarrona.
Comportamiento fanfarrón a gran escala
- Tomar el crédito por una victoria obtenida gracias al esfuerzo del equipo
- Alardear intencionadamente de todo lo que tienes (cuando sabes que tus compañeros de trabajo no tienen los mismos medios que tú)
Comportamiento fanfarrón a menor escala
- Presumiendo un abrigo nuevo que obtuviste con tu (bien merecido) bono
Cómo combatir el comportamiento fanfarrón
Conozca a su audiencia. Evalúe cuál es una conversación apropiada para el trabajo. Si es un líder que celebra un gran éxito, asegúrese de elogiar a todos los miembros del equipo que lo hicieron posible.
#8 Anti-Skill: Obstinado / Fijo
Cuando te ganas la reputación de ser terco o de actitud fija, estás trabajando activamente en tu contra. Si estás en una posición de liderazgo, estás trabajando en contra de toda tu organización. El cambio es incómodo, pero por eso puede resultar tan gratificante. Intenta mantener esto enfocado. La próxima vez que sienta que su reacción inmediata es un rotundo no, considere el motivo.
Actitud obstinada + fija a gran escala
- Una mentalidad de “a mi manera o por la autopista” que mantiene a su departamento funcionando en el pasado
- Negarse a escuchar cualquier idea que parezca fuera de su propio curso.
Actitud obstinada y fija a menor escala
- Requerir pruebas basadas en datos para cualquier + todos los cambios (si bien esto es sólido en teoría, algunos enfoques nuevos simplemente no tendrán pruebas basadas en datos).
Cómo combatir la terquedad + mentalidad fija
Haz una prueba de ego.
Por qué eres en realidad ¿Tan opuesto a cambiar algo, arreglar algo o atacar un problema de una manera nueva o innovadora? ¿Tu terquedad tiene sus raíces en el ego? Esta es una pregunta difícil de formular y aún más difícil de responder honestamente.
#9 Anti-Skill: Apático o Indiferente
La apatía y la indiferencia son bastante frustrantes de encontrar y sentir en el lugar de trabajo. Como dijimos antes, muchas de estas anti-habilidades son inevitables en ciertos momentos. Los empleos y las carreras van y vienen.
Apatía a gran escala
- Negarse a conectarse con su equipo en un proyecto
- No “recordar” la función del trabajo de un miembro del equipo
- Ignorar constantemente correos electrónicos y mensajes que solicitan su opinión o experiencia.
Apatía a menor escala
- Dejar correos electrónicos sin respuesta durante unos días
- Olvidar confirmar su asistencia a una reunión
Cómo combatir la indiferencia
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Anti-habilidades en el lugar de trabajo: 9 malos rasgos de personalidad que hay que dejar atrás
Anti-habilidades en el lugar de trabajo: 9 malos rasgos de personalidad que hay que dejar atrás
Bienvenidos a nuestro blog de desarrollo profesional. En este artículo, hablaremos sobre las anti-habilidades en el lugar de trabajo y los 9 malos rasgos de personalidad que se deben dejar atrás para tener éxito en el entorno laboral.
¿Qué son las anti-habilidades en el lugar de trabajo?
Las anti-habilidades son malos rasgos de personalidad que pueden obstaculizar el crecimiento profesional y el ambiente laboral positivo. A menudo, estas características son poco apreciadas por los empleadores y pueden afectar negativamente el rendimiento personal y colectivo en la oficina.
9 malos rasgos de personalidad en el trabajo
Eliminar estos malos rasgos de personalidad es fundamental para tener éxito en el lugar de trabajo y crear un ambiente laboral positivo. ¡Así que recuerda trabajar en tus habilidades y ser consciente de tu comportamiento para ser un profesional exitoso!
Si deseas obtener más información sobre habilidades laborales, te recomendamos visitar los siguientes enlaces externos:
- Inc.com
- Forbes
- Harvard Business Review
- Entrepreneur
Amente la reputación y la confianza en el entorno laboral. Mantener un sentido de ética y honestidad es fundamental para el éxito profesional.
- Incapacidad para colaborar: No trabajar bien en equipo puede afectar la productividad y la cohesión del grupo. La colaboración y la comunicación efectiva son claves para alcanzar objetivos comunes en un entorno de trabajo.
- Resistencia al cambio: Mostrar desinterés o negativa hacia nuevas ideas o procesos puede limitar el crecimiento tanto personal como organizacional. Ser flexible y abierto al cambio es vital para adaptarse a nuevas circunstancias y tecnologías.
- Comunicarse de manera ineficaz: La falta de claridad en la comunicación puede llevar a malentendidos y errores. Es importante expresarse de manera clara y concisa, tanto en la comunicación verbal como escrita.
- Procrastinación: Dejar las tareas para después puede afectar no solo tu rendimiento, sino también el de tu equipo. Establecer prioridades y cumplir con los plazos es esencial para mantener la productividad.
- Actitud negativa: Tener una mentalidad pesimista o crítica puede ser contagiosa y afectar el ambiente laboral. Adoptar una actitud positiva y constructiva es crucial para fomentar un entorno de trabajo saludable y motivador.
- Falta de habilidades interpersonales: Ser incapaz de relacionarse efectivamente con los demás puede ocasionar conflictos y malentendidos. Desarrollar habilidades interpersonales y emocionales es clave para establecer vínculos positivos en el lugar de trabajo.
Cómo dejar atrás las anti-habilidades
Para mejorar tu identidad profesional y dejar atrás estas anti-habilidades, considera los siguientes pasos:
- Autoevaluación: Reflexiona sobre tus comportamientos en el trabajo y cómo pueden estar afectando tu desempeño y relaciones. Identificar áreas de mejora es el primer paso hacia el cambio.
- Establecer metas: Fija objetivos claros y alcanzables para desarrollar habilidades más positivas y efectivas. Ya sea mejorar tu puntualidad o ser más colaborativo, tener un objetivo te ayudará a mantenerte enfocado.
- Buscar retroalimentación: No dudes en pedir la opinión de tus colegas o superiores sobre tu desempeño. La retroalimentación puede ofrecer perspectivas valiosas sobre áreas donde necesitas mejorar.
- Entrenamiento y formación: Participar en cursos de desarrollo profesional, talleres o seminarios puede ayudarte a adquirir nuevas habilidades y mejorar las que ya posees.
- Practicar la empatía: Intenta ponerte en la piel de tus compañeros de trabajo y entender sus perspectivas. El desarrollo de la empatía puede fomentar un ambiente laboral más armonioso y productivo.
Al abordar y trabajar en estas anti-habilidades, no solo mejorarás como profesional, sino que también contribuirás a un entorno laboral más positivo y colaborativo.
Arhoun: ¡Totalmente, chicos! Estas anti-habilidades son un verdadero lastre. En mi trabajo actual, tengo un compañero que siempre está hablando a sus espaldas y eso genera mucha desconfianza. Una vez, le di un toque amistoso y le dije que así no se construye nada bueno; sorprendentemente, lo tomó bien y ha hecho un esfuerzo por mejorar. Así que sí, definitivamente necesitamos ser más conscientes de cómo nuestras actitudes pueden afectar a los demás. ¡A dejar esos malos hábitos y a fomentar actitudes positivas en el trabajo!
Neizan daniel: ¡Exacto, Marco! Yo también he vivido situaciones así. En mi antiguo trabajo, había alguien que siempre se hacía la víctima y eso afectaba a todo el equipo. Fue un verdadero desgaste emocional. Al final, decidimos hablarlo entre nosotros y, aunque fue incómodo, mejoró mucho el ambiente. Estas «anti-habilidades» son un veneno, y es crucial identificarlas para poder crecer en el trabajo. ¡A eliminar esos malos hábitos y construir un mejor lugar para todos!
Could you please clarify what «po» refers to so I can provide a relevant comment? Thank you!
¡Totalmente de acuerdo, Marco! Me encanta que se hable de estos temas, porque a veces ni nos damos cuenta de lo que llevamos dentro. Yo recuerdo en un trabajo anterior que había un compañero que siempre estaba criticando a los demás y, al final, lo que logró fue crear un ambiente súper tenso. Aprendí que la comunicación positiva y manejar las diferencias es clave para un buen clima laboral. ¡A dejar esos malos hábitos atrás!
¡Este artículo es justo lo que necesitaba leer! Siempre he creído que las actitudes negativas en el trabajo pueden hacer más daño que cualquier error profesional. Recuerdo que en un empleo pasado, había un compañero que constantemente se quejaba y traía mala vibra al equipo. Al final, todos nos sentimos desmotivados y eso afectó nuestra productividad. Creo que dejar esos malos rasgos atrás no solo mejora el ambiente laboral, sino que también nos ayuda a crecer como personas. ¡Menos negatividad y más buena onda en la oficina!
¡Totalmente de acuerdo con lo que dice el artículo! He tenido que lidiar con un compañero que siempre estaba criticando a los demás en vez de aportar al equipo. Era súper tóxico y, la verdad, eso solo nos hacía perder el enfoque en nuestras metas. Un día, decidí hablar con él y le hice ver cómo su actitud estaba afectando el ambiente laboral. No fue fácil, pero creo que esa conversación le abrió los ojos. A veces, reconocer esos «anti-habilidades» puede ser el primer paso para mejorar el entorno en el trabajo. ¡Hay que dejar esas malas vibras atrás!
¡Muy interesante! Identificar y dejar atrás esos malos rasgos es clave para mejorar el ambiente laboral y fomentar la colaboración. ¿Cuál de estos consideras que es el más difícil de superar?
¡Totalmente de acuerdo con el artículo! He trabajado con personas que tenían esos malos rasgos y, la verdad, era un dolor de cabeza. Recuerdo una vez en una chamba donde había un compañero que siempre se quejaba de todo y no hacía más que propagar negatividad. Era tan tóxico que hasta afectaba la moral del equipo. Al final, decidimos hablarlo en una reunión y fue un alivio cuando se fue. A veces dejar atrás esos «anti-habilidades» es lo mejor que podemos hacer para mantener un buen ambiente de trabajo. ¿No creen?